HONRAR la tradición constituye un deber ético de toda sociedad que pretenda proyectarse hacia el futuro. No es una carga, sino una fuerza irresistible cuando está acompañada de valores. El periodismo ha firmado una extraordinaria hoja de servicios desde aquel primer número del Boletín Oficial de la Provincia, primera publicación contabilizada en nuestro territorio, que incidía en la trascendencia para los administrados de uno de los tres grandes ejes de este oficio: la formación. Las sucesivas cabeceras incorporaron la información y el entretenimiento, con las peculiaridades de una sociedad en la que los ilustrados ejercían un liderazgo a través de la opinión expresada en los medios que constituían.
En 1854, emergió El Eco de los Libres, el periódico liderado por Francisco García, con su orientación demócrata desde la que el emblemático director se alzó a altos cargos de responsabilidad. Incluso ese año, desde la Junta Revolucionaria que presidió, fue el primer parlamentario en reivindicar el sufragio universal en España. De la iniciativa de Francisco García López hemos tomado, por convicción e identificación, el nombre de este complejo de comunicación que es el Eco de los Libres Sociedad Limitada. Un diario como vehículo principal. Mucho más que un diario en representatividad y profundidad de su gran pasión: la vocación a la sociedad oscense de todos y cada uno de los pueblos de nuestro hermoso y robusto territorio.
El rosario de cabeceras concluyó con un hito histórico: EL DIARIO DE HUESCA. Una de las muchas realizaciones de Manuel Camo Nogués, alcalde que fue de la capital, diputado por varias circunscripciones provinciales, artífice del formidable Casino de Huesca, promotor del debate sobre los riegos del Alto Aragón, defensor de infraestructuras fundamentales hoy en diferentes comarcas. Líder primero del Partido Republicano Posibilista y después del Liberal, permaneció al frente del periódico más importante y longevo hasta su fallecimiento. A través de él registró las colaboraciones de magníficos hombres de letras como Joaquín Costa, Manuel Bescós (Silvio Kossti), Luis López Allué, Miguel Moya o Lucas Mallada. Leer EL DIARIO DE HUESCA a través de su hemeroteca es un auténtico gozo para los amantes del buen periodismo y de la literatura cuidada. Una singladura que se extendió desde el 16 de noviembre de 1875 hasta diciembre de 1936, el más longevo de la historia de nuestra provincia.
Ahora, un grupo de entusiastas profesionales de la comunicación toma la bandera del gran diario provincial para contribuir a vertebrar las inquietudes, las realizaciones y las aspiraciones de los más de doscientos mil oscenses de las diez comarcas. Una apuesta ambiciosa y humilde, audaz y participativa, tenaz y entusiasta, servicial en el mejor de los sentidos, sin renuncias ni resquicios a otras presiones que no sean las de las demandas de los ciudadanos. Aquí se muestra una puerta abierta para todos, una ventana de libertad, una mirada al porvenir, una defensa del buen periodismo, un buzón abierto a las sugerencias y a las iniciativas de este pequeño universo que es nuestra provincia. Una llamada a los altoaragoneses en la diáspora para que disfruten de la actualidad y del pensamiento engendrado en esta tierra, por estas mujeres y estos hombres, estos jóvenes y esas bibliotecas andantes que son nuestros mayores. Mucho que aprender. Mucho que ofrecer. Desde hoy, en sesión continua, EL DIARIO DE HUESCA. El diario de todos ustedes.