La solicitud a la Tesorería General de la Seguridad Social (TGSS) de 1.927,71 metros para el futuro Centro de Salud Santo Grial, que está en el alero de la respuesta del organismo central, es la propuesta del Gobierno de Aragón para una reapertura que sucedería al cierre cimentado en las insalubres y peligrosas condiciones de un edificio cuyas deficiencias han venido siendo advertidas por los profesionales en informes como el que a continuación les vamos a explicar, que constatan una dejadez notoria durante muchos años, al menos desde 2016 en que está fechado el citado documento.
La Tesorería General de la Seguridad tiene en su poder el requerimiento, junto a informes de la situación, del Servicio Aragonés para "ubicar el Centro de Salud nuevamente en este edificio a fin de seguir prestando asistencia sanitaria a la población que, en su momento y por el riesgo existente en el edificio, fue desplazada a otros".
La misiva solicita la cesión de la planta baja del edificio en su totalidad (1.155,60 metros) y parte de la planta primera con 772,11 metros y manteniendo la planta semisótano del clausurado centro de 200,37 metros, para un total de 2.148 metros "a fin de realizar las obras que se consideran necesarias para la seguridad tanto de pacientes como de usuarios". Esta solución ya fue señalada en 2016 en un informe emitido por dos doctoras y una enfermera a petición del Salud, sin que se adoptaran medidas para la solución a las deficiencias.
A su vez, pide que la Tesorería, como propietaria del inmueble, asuma las obras para el acondicionamiento del resto del edificio para fines exclusivamente sanitarios "de forma segura y adecuada a la función que va a realizar para pacientes y usuarios".
En la carta, de 3 de septiembre de 2024, se remonta el Salud a la situación anterior con los 1.500 metros de planta semisótano a cuarta (la tercera exenta) para atender a 22.000 usuarios de la capital oscense. El 15 de abril de 2024 fue "cerrado temporalmente por la incompatibilidad del uso asistencial con los problemas identificados en el edificio".
A instancias de profesionales y por las quejas de los usuarios, explica la misiva, tres inspectores médicos reflejaron deficiencias en un acta y el 17 de octubre un informe técnico de la Dirección del Área de Obras, Instalaciones y equipamientos del SAS detalla los problemas y las posibles soluciones. El Salud explicita que se precisa una distribución más racional para las obras de acondicionamiento, entre otras necesidades para una red de agua que presenta "niveles altos de metales pesados que imposibilitan el consumo humano", lo que demanda una renovación y saneamiento integral de todo el circuito del edificio que el organismo autonómico entiende que corresponde a la TGSS por ser la titular.
Idéntica reclamación por los ascensores que debería acometer la Tesorería al tener que modificar un elemento que no es privativo del centro sanitario, sino constructivo común del edificio que da servicio a todos los espacios, y se atiene a la Ley 9/2017 de Contratos del Sector Público, ya que no se puede acreditar la disponibilidad del espacio objeto del contrato y, por tanto, no se pueden licitar las obras.
EL INFORME DE 2016
Un informe revelador de la degeneración de la situación del Santo Grial data del 16 de septiembre de 2016 con fecha de registro de 11 de noviembre posterior firmado por dos doctoras y una enfermera, remitido a la directora de Atención Primaria del Sector de Huesca.
En la introducción, sostiene que en los últimos cuatro años el Centro "ha sufrido un gran deterioro, debido a la antigüedad del edificio y a la falta de actuaciones para mantenerlo y adecuarlo, porque se pensaba trasladar a un nuevo edificio en la zona Sur de Huesca" cuya construcción se demoraría "mínimo de cuatro años". Aduce que el personal del Santo Grial "ha solicitado reiteradamente desde hace muchos años ayuda para subsanar estos problemas. Siempre se ha tenido una actitud prudente y colaboradora, pero ante la situación actual a la que se ha llegado, y el deterioro que sufrirá durante el tiempo que se siga trabajando en este edificio" ha conducido al "Equipo a una situación de "no poder más"", por lo que se reclama valorar los problemas más acuciantes.
Ya en este informe se sostiene, como ahora reclama el Salud, que "parte de estos problemas podrían arreglarse ampliando hacia el edificio deshabitado colindante, que pertenece a la Tesorería del Instituto Nacional de Seguridad Social".
Abunda en primer lugar en los problemas de accesibilidad con una rampa en la calle de "pendiente exagerada" e impracticable para una silla de ruedas ni andadores. En el ascensor, no caben cochecitos de gemelos para subir a la primera planta. Es el único elevador para una población de 22.000 pacientes y se avería frecuentemente. No caben camillas y, si se sobrepasa el peso, se queda por debajo del nivel 30 o 40 centímetros. "Cada vez baja más". Al no memorizar por su antigüedad, "la gente en la segunda planta muchas veces están más de un cuarto de hora esperando".
El personal, al ser zona azul, puede pagar 135 euros al año, añade. Otra deficiencia es que no existe consulta de Urgencias para atender emergencias y el desfibrilador está en la sala de extracciones que, a su vez, es la de esterilización. En esta estancia conjunta, se hacen los electrocardiogramas, espirometrías y cirugía menor. "Las dimensiones son tan pequeñas que, cuando está el paciente acostado, no puede pasar de un lado al otro de la camilla".
En cuanto a la salida de emergencia, se abre con una llave "que puede no estar (Ya ha habido personas "okupas")". Los ventanales de la primera planta tienen verjas. La salida de la segunda es a través de un almacén con los productos a la vista y siempre con la puerta abierta.
En la planta baja, la puerta se queda abierta en invierno al no poder acoger la afluencia de usuarios. El hall de recepción es muy pequeño. "Las administrativas están hacinadas, con excesos de frío y calor" y la centralita está habitualmente colapsada.
La enumeración de desperfectos se prolonga. Hay un montacargas para bajar al almacén inutilizable, con peligro de que, al no sujetarse la plataforma, pueda caer al foso alguien que acceda, y señalan la afluencia de niños con sus progenitores cuando vienen a pedir cita.
Camillas deterioradas, puertas de madera y ventanas astilladas (con el peligro para la seguridad para limpiarlas), riesgo de precipitación por las ventajas de las escaleras si están abiertas al coincidir el nivel de la superior con el del alféizar, cableado de las consultas de pediatría en el suelo y a mano de los niños y una de las cuales es "tan pequeña que los padres tienen que levantarse de las sillas cuando la pediatra va a explorar al niño", junto con el mal estado de la pintura son otras deficiencias. Igualmente, hay dos consultas de Medicina sin lavabo por lo que no se pueden lavar las manos. En una se colocó una bomba de agua que desprendía malos olores en días lluviosos.
En la segunda planta, una minúscula consulta del trabajador social que impide a las familias entrar o sentarse si va más de un acompañante. En caso de pacientes "peligrosos", no hay timbre de alarma bajo la mesa. Los baños para las mujeres no permiten el paso al no haber espacio entre puerta y lavabo, imposible para las gestantes. Consultas sin agua caliente y muchos suelos de sintasol (con corros alrededores de los rodapiés) acrecientan la sensación de decrepitud.
Exenta la tercera, en la cuarta se aprecia el deterioro en el pavimento de la sala de espera de una planta que atiende a 4.500 pacientes y los tratamientos con quimiosupresores. La reincidencia de las averías del ascensor agrava la impresión mientras aguardan los pacientes sin aire acondicionado y con un gran calor en verano. Las carpinterías desajustadas en puertas, ventanas y persianas (en este caso en la sala de juntas) son otros desperfectos.
En términos generales, el centro exige limpieza a fondo de mantenimiento, azulejos, rincones, juntas y paredes y pintura de paredes y carpinterías. También ajustar las ventanas, limpiar y revisar los aparatos de aire acondicionado, solventar los problemas de las palomas que anidan junto a éstos y también, concluye el informe, poder disponer de tres plantas con una primera para recepción, pediatría, urgencias, con accesos adecuados y dos plantas más para el resto del Equipo y no cinco como hasta ahora.
SIN CALIDAD DEL AIRE Y AGUAS CON METALES
El 7 de septiembre de 2023, tras las quejas de usuarios y trabajadores por las deficiencias del Consultorio Médico de Santo Grial (ya en funcionamiento del Fidel Pagés Miravé en Los Olivos), se realiza una visita por tres inspectores médicos en la que se abunda en las anteriormente detectadas en 2016 lógicamente agravadas por años sin soluciones de calado.
En el acta de los inspectores, se reflejan deficiencias en la rampa de acceso, en los ascensores que no cumplen la normativa de accesibilidad, en la existencia de un sólo baño accesible en planta baja y sin barra de apoyo del inodoro, en el estado de suelos, paredes, escaleras y carpinterías; en la inadecuación de la calidad del aire en la planta segunda, en la falta de limitación para acceder al semisótano por no haber separación entre zonas sanitarias y no sanitarias salvo con una cadena; en los problemas de humedad del semisótano, en la instalación eléctrica y en la caldera de gasóleo.
El director del Área de Obras, Instalaciones y Equipamientos explica en octubre de 2023 las dificultades para dar solución a estos desperfectos. Primero, que una nueva rampa de acceso precisaría ocupación de espacio público en la acera. Segundo, que la actuación sobre los ascensores para la accesibilidad no es viable porque es un elemento común de un edificio en el que el Salud sólo ocupa una parte. Tercero, la creación de aseos accesibles requeriría obras importantes no compatibles con la actividad asistencial. Cuarto, que la mejora de la calidad del aire interior exige una actuación que demandaría el cierre de la sala de espera de la planta segunda. El resto de cuestiones sí serían subsanables sin afectar al funcionamiento ordinario.
El Servicio de Evaluación y Acreditación sobre las instalaciones del consultorio también recibió el informe de análisis realizados en el laboratorio de Salud Pública de Zaragoza de muestras de agua de boca tomadas el 11 de septiembre de 2023, 7 en total, dos de ellas en cada una de las plantas baja, primera y segunda y una en la cuarta.
En todos los casos, se aprecian "unas deficiencias graves que imposibilitan que esta agua se pueda consumir, y sin entrar en las medidas que se puedan tomar por parte de Salud Púbica, pensamos que sería necesario realizar una revisión de toda la red de distribución del agua por el centro y/o en la acometida, que seguramente exigirían de igual forma una obra importante".
En esa fecha, como medida provisional urgente recomienda carteles informativos en todos los puntos de agua incidiendo en que "no es apta para el consumo humano", y atribuye estos resultados a la antigüedad de las tuberías que habrían de ser sustituidas.
Los altísimos niveles de plomo y níquel fundamentalmente, además de hierro, manganeso, cobre y boro provocan la falta de aptitud del agua para el consumo humano.
El 24 de octubre de 2023, se vuelven a efectuar análisis que nuevamente arrojan niveles altos de algunos metales pesados y abundan en que habría que renovar y sanear integralmente todo el circuito de averías que requiere una obra de importancia y es "no compatible con el funcionamiento del centro".
La conclusión que acompaña a todos estos informes es que se valore "el cierre o bien traslado temporal de la actividad asistencial a otro centro mientras, si se estima, se acometan obras de acondicionamiento del centro".
Concluye el director general de Asistencia Sanitaria y Planificación, Ramón Boria, que "para que el centro preste un servicio con condiciones estructurales de seguridad habría que solucionar problemas de accesibilidad, ventilación, renovación completa de tuberías, fontanería, electricidad, suelos, maderas, paredes y cubiertas. Obras que imposibilitan el mantenimiento de la actividad asistencial". Este informe fue transmitido a la TGSS y precedió al cierre del Santo Grial el 15 de abril de este 2024. Pero la historia venía de atrás, muy atrás.