Ver bailar a Eros Recio es un auténtico disfrute. Su derroche de energía en unos momentos, su suavidad en otros, la expresión de su mirada, la delicada posición de sus manos, el movimiento de sus dedos o la manera que tiene de deslizarse sobre el suelo traspasa cualquier distancia y hechiza al espectador.
Un grupo de oscenses tuvo este sábado el privilegio de poder asistir a una presentación, en "petit comité", del espectáculo en el que está trabajando actualmente, en torno al Santo Grial.
El joven valenciano, primer bailarín profesional con Síndrome de Down, acudió a Huesca para participar en el Concurso Internacional de Danza “Vaslav Nijinsky”, donde ha obtenido una medalla en la categoría de Ballet Clásico, con la interpretación de Finlandia, de Sibelius, y otra en Ballet Flamenco, tras bailar La Tarántula.
Después, y por invitación de la asociación Huesca Cuna de San Lorenzo y de la Asociación de Vecinos de La Encarnación, estrenó en el local del barrio su último proyecto y dio a conocer también el libro que ha publicado y que resume la obra teatral, "El Grialato".
Fueron 70 minutos en los que el bailarín se vació por completo y el público se lo agradeció con numerosas muestras de emoción y de cariño.
"Le da igual actuar para 20 personas que para 200, él lo da todo -comentó su padre, Carlos Recio-. Él quería hacer cosas y no le daban oportunidades, así que las hemos construido. Siempre buscamos el lado positivo de las cosas y hacemos historias que aporten valores y que den un soplo de optimismo".
El espectáculo aborda un asunto de especial interés para la provincia de Huesca y el resto de Aragón, unidas a la Comunidad valenciana por el Camino del Santo Grial. Eros diseña las coreografías y su padre es el autor del texto. A lo largo de la función, el bailarín va mostrando los principales símbolos espirituales que identifican este itinerario y con pocos elementos consigue una puesta en escena muy visual.
Carlos Recio, que es fundador de la Asociación del Santo Grial y escribió su primer libro sobre este tema en 2003, asegura que "es una historia bonita, que merecía tener un referente en la cultura: no había una película, no había una novela, no había nada. Ahora ya hay un espectáculo da danza".
Además, añade, "trata también la inclusión de la discapacidad y las posibilidades que ofrecen la cultura, el teatro y la danza, para que las personas con discapacidad vayan creciendo y se vayan uniendo al mundo".
El Monasterio de San Juan de la Peña tienen un peso importantísimo en el espectáculo, pero también otros lugares aragoneses por los que pasa este desconocido itinerario que atraviesa el territorio.
Eros Recio (Valencia, 9 de octubre de 1993), se encuentra en pleno desarrollo artístico de su carrera, aunque su currículum comienza a ser ya bastante extenso. Cursó la enseñanza elemental en la Escuela 2 Paterna y su formación como bailarín en el Conservatorio Profesional de Danza de Valencia. Calificado como “el Nijinsky de la Discapacidad”, participó en el programa de danza “Mira quién baila” de RTVE, ha realizado cursos específicos en diversas academias de danza y centros dramáticos con distintos profesores y profesoras de ballet clásico y danza contemporánea y acumula varios reconocimientos nacionales e internacionales por su labor. Fue felicitado personalmente por los Reyes de España como ejemplo de superación e integración humana.
"Las personas con síndrome de Down tienen determinada propensión a la danza y a las artes en general, lo que pasa que no se confía en ellas lo suficiente para hacerlas subir hasta arriba -considera su padre-. Además de todo eso, Eros tiene mucha curiosidad y mucho afán de crecer".
El objetivo del bailarín y de su padre, que siempre le acompaña, es que las personas que viven en el Camino del Santo Grial lo conozcan y lo valoren, al igual que otras ajenas a él. "Y que sepan que existe el Grialato y que hay un Año Santo igual que existe un Año Santo del Camino de Santiago.
"Hacer un camino de este tipo no es una mera actividad turística, es un viaje de autoconocimiento, de encontrarte a ti mismo, de conocer tus defectos para mejorar", concluye, no sin expresar antes su deseo de regresar a Huesca con un teatro y una puesta escénica más profesional.