El Campus de Huesca de la Universidad de Zaragoza se ha sumado este lunes, 25 de noviembre, al Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, con un acto celebrado a las 12:00 horas en la entrada de la Facultad de Ciencias Humanas y de la Educación (c/ Valentín Carderera, 4). Sonia Marinela Sosoi, estudiante de Magisterio, ha sido la encargada de leer el manifiesto universitario, en presencia de estudiantes, profesorado y personal técnico del campus.
Con esta iniciativa, el campus público aragonés ha reafirmado su compromiso con la construcción de una sociedad igualitaria, que ponga fin a la violencia contra las mujeres y niñas, al tiempo que defiende los valores democráticos y los derechos humanos como ejes fundamentales en las universidades españolas. Actos similares se han celebrado de manera simultánea en las sedes de la Universidad de Zaragoza en Teruel y Zaragoza.
En su manifiesto, la Conferencia de Rectores y Rectoras de Universidades Españolas (CRUE) ha denunciado que la violencia de género es una de las violaciones de derechos humanos más devastadoras y extendidas en el mundo. Naciones Unidas estima que casi una de cada tres mujeres ha sido víctima de violencia física o sexual al menos una vez en su vida. Además, los datos son alarmantes: en 2023, más de 51.000 mujeres y niñas fueron asesinadas por parejas, exparejas o familiares en todo el mundo. En España, las cifras han alcanzado las 58 mujeres asesinadas en 2023 y 40 en lo que va de 2024, dejando a 30 menores huérfanos.
El Campus de Huesca se ha adherido a la campaña de Naciones Unidas para 2024, con el lema «Cada 10 minutos se asesina a una mujer. #NoHayExcusa. ÚNETE para poner fin a la violencia contra las mujeres», renovando su compromiso con la promoción de entornos seguros y libres de violencia, especialmente en los espacios universitarios.
Desde la Universidad de Zaragoza se ha destacado el papel de las instituciones académicas como entornos privilegiados para investigar las causas de la violencia de género y desarrollar soluciones para erradicarla. Las universidades trabajan para fomentar la escucha activa, el acompañamiento a las víctimas y la reparación del daño, aplicando perspectivas de género, interseccionalidad y diversidad.
Con este acto, el Campus de Huesca ha reafirmado su responsabilidad como espacio de reflexión y acción para erradicar las violencias que impactan en la salud, educación y oportunidades de millones de mujeres y niñas. La comunidad universitaria se mantiene firme en su compromiso con los derechos humanos y la igualdad, promoviendo acciones que garanticen un futuro libre de violencia para las nuevas generaciones.