Aínsa ha pasado a la fase definitiva del concurso de la iluminación navideña de Ferrero Rocher. La localidad sobrarbense ha realizado un gran trabajo para trasladar la ilusión por esta iniciativa a los altoaragoneses, que se ha traducido en votos, suficientes apoyos para seguir entre los candidatos.
Comparte este último tramo de la carrera con Mojácar y Santillana del Mar, y ya se puede participar en las votaciones.
En esta novena edición del concurso “Juntos brillamos más” de Ferrero Rocher han participado más pueblos que en las anteriores, un total de siete. En concreto, Aínsa ha competido por iluminar sus calles en esta primera fase con Cazalla de la Sierra (Sevilla), Chinchón (Madrid), Mojácar (Almería), Portomarín (Lugo), Santillana del Mar (Cantabria) y Sigüenza (Guadalajara), todos ellos seleccionados por “su encanto, riqueza cultural, gastronomía y el poder de acogida de sus vecinos", entre otros aspectos.
La segunda fase de votación se prolonga hasta el 11 de diciembre y al día siguiente se comunicará el ganador que recibirá la impresionante iluminación navideña de Ferrero Rocher para su anuncio navideño.
Aínsa ha creado la página web www.iluminaainsa.com que permite participar en la votación. "Ilumina Aínsa con tu voto para que sea el pueblo más brillante de España", es la petición que realiza y se acompaña con un vídeo protagonizado por Paco Paricio, de Los Titiriteros de Binéfar.
Ferrero Rocher explica que hará brillar "uno de los pueblos más emblemáticos de España con el objetivo de compartir una Navidad llena de luz y alegría. Para ello, se van a instalar un conjunto de luces LED de alta eficiencia energética, una opción que implica una reducción del 75 % del consumo con respecto a las bombillas de bajo consumo. Se calcula que la iluminación tiene un consumo orientativo de 5 kw/hora, lo que supone un consumo menor que el que generan tres hogares con una estufa eléctrica conectada (calculado sobre un promedio de 6 horas de iluminación diaria)".
Asimismo, describe en su página web (www.ferrerorocher.com) a través de la que también se puede votar, aspectos relevantes de las tres localidades que quedan en competición.
Dice de Aínsa que se trata de una pequeña villa medieval a los pies de los Pirineos, estratégicamente ubicada entre los ríos Cinca y Ara. Destaca su conjunto arquitectónico de gran riqueza histórica, como la imponente Iglesia de Santa María de Aínsa, el amplio recinto del castillo y su majestuosa Plaza Mayor. Apadrina en este concurso a la localidad sobrarbense Morella, en Castellón, uno de los ganadores de este concurso.
De la localidad costera de Mojácar, apadrinada por Peñíscola, la firma italiana dice que "se identifica fácilmente con el aroma mediterráneo y el inconfundible color azul de sus playas. El carácter acogedor de su gente combina con el encanto natural de sus casas blancas, propias de la región andaluza que representan en esta edición".
Finalmente, recuerda que Santillana del Mar, a quien apadrina Rubielos de Mora, es conocida popularmente como la villa de las tres mentiras, pues ni es santa, ni es llana ni tiene mar. "Santillana del Mar y sus calles empedradas recogen años de historia y un aire bucólico por el conjunto arquitectónico que levanta la villa, de estilo medieval", apunta.