Las Hermanas de la Caridad de Santa Ana suprimen su comunidad en Monzón tras 132 años, por la imposibilidad de encontrar hermanas para la comunidad. En la capital del Cinca Medio seguirán manteniendo del colegio y la congregación continuará presente en Fraga. Desde el Obispado de Barbastro Monzón se ha lamentado profundamente esta marcha.
La superiora provincial de las Hermanas de la Caridad de Santa Ana, la hermana Ana Felisa Pablo Bernal, ha trasmitido por carta al obispo de Barbastro-Monzón, Ángel Pérez, la decisión tomada y ha explicado que la congregación ha adoptado esta “dolorosísima decisión" debido a "la imposibilidad de encontrar hermanas que refuercen la comunidad”.
“La tarea del Colegio Santa Ana, prosigue la carta, la seguiremos manteniendo con el equipo de titularidad de la Red de Centros Santa Ana que acompañará al equipo directivo del centro”.
Así mismo, la superiora recuerda que la presencia de esta congregación continúa en esta diócesis “en la que siempre hemos aprendido a querer y servir a los más pobres y necesitados”. La congregación seguirá presente en Fraga, donde permanecen desde 1891.
La Diócesis de Barbastro-Monzón lamenta profundamente la marcha de esta comunidad que, "fieles a su carisma de la Caridad, ha vivido entregada a su labor en los campos sanitario y educativo. Las Hermanas de la Caridad de Santa Ana agradecen a Dios más de un siglo de servicio a la ciudad de Monzón y a toda la diócesis. La comunidad pide a los fieles oraciones por las vocaciones, tan necesarias y escasas en estos momentos", expone.
El próximo 5 de octubre, a las 19 horas, la Concatedral de Santa María de Monzón acogerá la eucaristía de acción de gracias y despedida de estas religiosas, que llevan 132 años en la capital del Cinca Medio.