El aragonés es una lengua que sigue viva, que aguanta en el ámbito familiar, en municipios pequeños y cuanta más edad se tiene, más se habla. Éstas son algunas conclusiones del libro 'Adaptación y pilotaje de la encuesta de usos lingüísticos de la Franja (català d´Aragó) al caso aragonés' , que se ha presentado este lunes, 26 de febrero, en el Campus de Huesca, junto a otra publicación, 'El aprendizaje del aragonés en la vida adulta'.
Ambos forman parte de colección Papers d´Avignon de Prensas Universitarias y han sido impulsados por la 'Cátedra Johan Ferrández d´Heredia, de lenguas propias y patrimonio inmaterial de Aragón', que dirige José Domingo Dueñas.
El objetivo de 'Adaptación y pilotaje de la encuesta de usos lingüísticos de la Franja (català d´Aragó) al caso aragonés' es ofrecer herramientas para el estudio sociolingüístico de esta lengua y ha sido elaborado por los profesores altoaragoneses de la Universidad de Zaragoza Antonio Eito y Chaime Marcuello.
El texto adapta a la lengua aragonesa la Enquesta d'Usos utilizada en trabajos anteriores para estudiar las variedades del catalán de Aragón (cuyos resultados se recogen también en un volumen de la citada editorial universitaria).
Este trabajo pretende facilitar la investigación sociolingüística del aragonés que es "la lengua románica más amenazada de Europa", recuerdan los autores, que ya han publicado anteriormente otros trabajos que advierten sobre los problemas para su continuidad. Los resultados de esta macroencuesta, realizada en 2023, no han visto todavía la luz y existe incertidumbre al respecto. "La Cátedra ha visto cortada su financiación, tristemente, por ideologías lingüísticas que no tiene nada que ver con la realidad", lamenta.
El estudio abarcó todo el norte de la provincia de Huesca y la capital, y alguna zona de Zaragoza. Se dieron por válidas 1.002 encuestas que, entre otras conclusiones, indican que "el aragonés resiste más en los municipios más pequeños, se utiliza más en el ámbito familiar y hay una horquilla de unas 8.000 personas que hablan esta lengua habitualmente". Además, entre 30.000 y 50.000 personas aseguran tener algún conocimiento.
"Lo que está claro es que el aragonés sigue vivo, hoy en día, se sigue utilizando como lengua de comunicación, incluso la propia administración, sobre todo la más cercana", afirma Antonio Eito, al tiempo que ha apuntado que "sería importante que este trabajo tuviera continuidad, para que, siguiendo la misma metodología, se pudieran comparar cómo evoluciona el uso".
Por otro lado, ha apuntado que el uso de la denominación culta "Aragonés" aumenta frente a otras como "Fabla", y que "algún reto" se denomina casi "monolingüe" en aragonés, aunque es un contexto minoritario.
LA ENSEÑANZA PARA ADULTOS
Completar los trabajos sobre los distintos niveles de la enseñanza de estas amenazada parte de nuestro patrimonio cultural es el propósito de el titulado 'El aprendizaje del aragonés en la vida adulta', que suscriben las investigadoras de esta institución, en sus sedes de Huesca y Zaragoza, Iris Campos, Rosa Tabernero y María Jesús Colón.
Por su parte, el trabajo que presentan María Jesús Colón, Iris Campos y Rosa Tabernero recoge los resultados de una investigación llevada a cabo en diferentes contextos de enseñanza del aragonés para personas adultas. Grupos de centros de Educación de Adultos de localidades como Jaca, Sabiñánigo, Ejea, Alagón o de distintos pueblos del Somontano; otros de asociaciones culturales que imparten esta formación desde hace décadas; y los grupos universitarios del Diploma en Filología Aragonesa y la Mención en Lengua Aragonesa del Campus de Huesca han sido objeto de este estudio.
Bajo un enfoque cualitativo se recogen y analizan las representaciones del alumnado acerca de la situación del idioma, el lugar que ocupa en su identidad o los usos y contextos en que aplica lo aprendido. En muchos de estos aspectos, señala la coordinadora del estudio, la profesora del campus de Huesca Iris Campos, se constatan diferencias de percepción y de práctica entre los estudiantes de las comarcas del norte, de presencia tradicional del aragonés, y los de otras áreas de la Comunidad.
Esta investigación es la primera realizada sobre el aprendizaje del aragonés en la vida adulta y complementa los trabajos previos sobre su enseñanza en Educación Infantil y Primaria y en las enseñanzas secundarias, también coordinados por Iris Campos, que se incluyen en los libros 'Lengua minorizada y enseñanza', sobre la situación y perspectivas del aragonés en la escuela, sus metodologías y resultados de enseñanza; y 'Las actitudes lingüísticas en los centros de educación secundaria del Alto Aragón'.
"Hemos analizado cuáles son las motivaciones y cómo se reconstruyen las identidades lingüísticas de las personas que aprenden aragonés en diferentes contextos socioeducativos -explica Iris Campos- y los resultados son amplísimos, porque el volumen de datos lo es. Hemos abarcado muchos contextos que geográficamente y sociolingüísticamente son muy diversos. Entre los principales resultados podríamos destacar que la motivación hacia el aprendizaje del aragonés suele estar muy sustentada en lo que se siente por la lengua ya antes de decidir cursar este tipo de enseñanzas, o a la hora de utilizarlo. Hay variables que afectan de forma muy influyente, como puede ser el contexto geográfico y sociolingüístico".
Rosa Tabernero ha destacado que este libro se inserta en el marco de investigación del grupo consolidado por el Gobierno de Aragón y "tiene que ver con con una de las líneas de trabajo de mayor vitalidad, como es la didáctica de la lengua aragonesa y, sobre todo, de el estudio de las actitudes tanto de los aprendices, como de los hablantes y de los profesores.
Tabernero ha recordado que Iris Campos defendió en 2017, en su tesis doctoral, la situación del aragonés en el marco educativo para seguir después con una investigación más compleja, con una muestra lo suficientemente significativa. "Ahora, uno de los proyectos más importantes en los que se está trabajando es un proyecto Horizón, de carácter europeo, de gran solidez, liderado por la Universidad de Tallín" y en el que participan también las de Helsinki, Montpellier, Paul Valery, una universidad italiana y Unizar.
"Se trata de estudiar, desde el punto de vista educativo, cómo se enseña la lengua minorizada, cómo se pueden abrir caminos para perpetuar la lengua, para salvar una lengua en peligro de extinción. Éste es nuestro cometido y hacerlo con mucha seriedad, desde los datos que nos ofrece la investigación", ha añadido.
LA CÁTEDRA DE LENGUA ARAGONESA
El Campus de Huesca, que es sede de las enseñanzas de Aragonés de la Universidad de Zaragoza, oferta cuatro propuestas formativas en torno a esta lengua, que es una de las más amenazadas de Europa. El Diploma de Especialización en Filología Aragonesa, postgrado que puede seguirse en línea, es una de ellas. Esta enseñanza, que tiene casi quince años de trayectoria, fue el primer título universitario sobre el aragonés.
También imparte las especialidades en Lengua Aragonesa de los grados de Magisterio en Educación Infantil y en Educación Primaria, que solamente existen en la capital oscense. Además, cualquier estudiante de los distintos grados de las escuelas y facultades altoaragonesas puede matricularse en una asignatura complementaria de Iniciación a la Lengua Aragonesa.
Esta Cátedra es fruto de un convenio entre el Gobierno de Aragón y la Universidad de Zaragoza, que se firmó en 2017, "con el objetivo básico de fomentar, propiciar y defender las lenguas propias, básicamente, el aragonés, también el catalán de Aragón y el Patrimonio Inmaterial de Aragón", explica José Domingo Dueñas.
Desde entonces, se han editado 16 libros, se han promovido unas 30 ayudas a la investigación, se ha participado en distintas exposiciones y se han acometido otras iniciativas. Actualmente, el convenio está pendiente de firma, pero, de momento, el interés por darle continuidad sólo parece persistir en la Universidad de Zaragoza.
Dueñas considera que esta cátedra "ha servido para ayudar a impulsar el estudio del aragonés y que haya más alumnos en distintos niveles".
Añade, asimismo, que "se han respetado al máximo las distintas variantes, es decir, la realidad lingüística de cada territorio" y se trata también "de que la gente hablante no se sienta olvidada, no se sienta como extraña ni rara, sino que sepa que habla una lengua romance, que deriva del Latín igual que otras".
DOS EXPOSICIONES
Dentro del citado ciclo de actividades del Campus de Huesca se incluyen también dos exposiciones, que podrán visitarse, hasta el día 29, de 8:30 a 21 horas- dos exposiciones. 'Arias lingüisticas d'Aragón e de l'aragonés' es el título de la ubicada en la Facultad de Empresa y Gestión Pública. 58 mapas muestran la riqueza del patrimonio lingüístico de esta comunidad, mostrando la distribución territorial de distintas palabras o formas que designan los mismos conceptos en alguna de las tres lenguas presentes en sus comarcas. Estudios de muy diversos autores han servido de base para la elaboración de estos mapas que ha coordinado el filólogo Francho Nagore.
La Facultad de Ciencias Humanas y de la Educación acoge, paralelamente la titulada 'O nuestro charrar / El nostre parlar'. Esta muestra, que forma parte de un proyecto didáctico más amplio –que incluye un libro y distintos materiales para el aula-, recupera frases hechas y expresiones en aragonés y en catalán de Aragón. Acompañadas por textos de la profesora del campus oscense Iris Campos e ilustradas por Delia Tello, la muestra busca los aspectos más divertidos y originales de estos recursos lingüísticos que forman parte del patrimonio cultural de esta Comunidad y de la vida de muchos de sus habitantes.
El acto celebrado este lunes acto forma parte del programa del Campus de Huesca con motivo de la celebración del Día Internacional de la Lengua Materna, que convoca cada amo la Unesco con el objetivo de sensibilizar sobre la necesidad de preservar el patrimonio lingüístico y cultural de la humanidad. Esta agencia de las Naciones Unidas situaba ya en 2009 al aragonés -al que adjudicaba en torno a 10.000 hablantes- entre las lenguas en peligro de extinción. La situación se ha agravado posteriormente, señalan algunos filólogos como el profesor oscense Francho Nagore, al romperse la transmisión intergeneracional de la lengua en numerosas áreas.