Manos Unidas Huesca ha inaugurado este lunes su tradicional Rastrillo Solidario, un evento que marca el inicio del adviento y que tiene como propósito recaudar fondos para luchar contra el hambre y la pobreza en el mundo. Rosa Tenas, presidenta de la delegación, ha dado la bienvenida a los asistentes, destacando la importancia de esta cita anual como un momento de encuentro fraterno y solidario.
Rosa Tenas ha transmitido el saludo y la bendición de monseñor Vicente Jiménez Zamora, administrador apostólico de la Diócesis, quien, por compromisos de agenda, no ha podido asistir. Además, ha agradecido profundamente a los voluntarios, colaboradores, benefactores e instituciones, así como a la parroquia de Santiago Apóstol, que siempre abre sus puertas para acoger este evento. "La generosidad de todos ustedes se une al esfuerzo de nuestras voluntarias, que dedican tiempo y cariño a preparar productos únicos", ha señalado Tenas. A la apertura del rastrillo han asistido también la alcaldesa de la ciudad, Lorena Orduna, la concejala de Servicios Sociales, Marta Escartín, la de Participación Ciudadana, Susana Oliván, y el presidente de la Plataforma del Voluntariado, Juan Hidalgo.
El rastrillo cuenta con una gran variedad de productos elaborados por las voluntarias, como ropa de bebé, juegos de toallas, mantelerías, cojines, adornos navideños y jabones artesanales. Entre estos últimos, destacan jabones con esencias únicas, como el elaborado con romero macerado durante cuatro meses, o el jabón de aloe vera, con ingredientes provenientes de La Mancha. "Cada producto refleja el amor y el cuidado con el que ha sido confeccionado", se ha señalado.
Durante el acto, se ha proyectado un vídeo preparado por las voluntarias que resume las actividades realizadas durante el año. La generosidad y solidaridad de tantos oscenses que visitan el rastrillo hacen posible que este esfuerzo se transforme en ayuda concreta para quienes más lo necesitan, ha enfatizado la presidenta.
PROYECTO EN LA INDIA
Este año, todo lo recaudado en el Rastrillo Solidario se destinará a un proyecto de atención médica y formación en salud preventiva en 12 aldeas tribales de las montañas de Manipur, en el nordeste de la India. Este proyecto, que beneficiará a 3.500 habitantes, busca proporcionar consultas médicas gratuitas, medicinas y formación en prevención sanitaria en aldeas donde el acceso a la salud es prácticamente inexistente debido a la lejanía, la falta de recursos y los altos costos.
Estas comunidades se enfrentan a numerosas enfermedades infecciosas, agravadas por el consumo de sustancias como alcohol y drogas, y la falta de información sobre sus efectos, ha explicado Lucía González. Para ello, se organizarán 12 campamentos sanitarios de un día con personal del Centro Médico Católico de la región, gestionado por los servicios sociales diocesanos.
El proyecto, con un presupuesto de 14.602 euros, será financiado gracias a las aportaciones de Manos Unidas y de su socio local, que asumirán los costos de personal, medicinas y organización. Esperamos que nuestras manos unidas se llenen de solidaridad, compromiso y entusiasmo para que este rastrillo sea un éxito y podamos dar esperanza a quienes más lo necesitan, ha indicado González.
Manos Unidas se alinea plenamente con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), entre los que destaca el compromiso de garantizar una vida sana y promover el bienestar para todas las personas, sin importar la edad. Durante la inauguración del Rastrillo Solidario de este año, se ha recordado que, aunque los ODS han ganado notoriedad en los últimos años, muchas organizaciones católicas, incluyendo la diócesis, llevan décadas trabajando en estos mismos principios a través de sus proyectos y acciones.
Rosa Tenas ha recordado que la Iglesia, mediante sus instituciones y voluntariado, viene trabajando con esta perspectiva desde hace muchísimo tiempo.
RECONOCIMIENTOS
En un momento especial del acto, Manos Unidas ha entregado sellos solidarios como muestra de agradecimiento a empresas que apoyan regularmente sus iniciativas. Este año, los reconocimientos han recaído en el Restaurante Tatau, con una estrella Michelin, y en el Monasterio de Boltaña, que han contribuido donando premios para la lotería solidaria. No han podido asistir representantes del establecimiento hostelero de la capital altoaragonesa, pero sí lo ha hecho Alberto Ruiz, director de las instalaciones sobrarbenses, al que se le ha agradecido su constante generosidad.
Además, se ha presentado un nuevo reconocimiento: el galardón de "Empresa Amiga de Manos Unidas", que busca destacar el apoyo constante y discreto de algunas empresas locales. En esta primera edición, el premio ha sido otorgado a Cabrero e Hijos, responsables de la donación anual de un jamón como segundo premio de la rifa solidaria. "Agustín, este premio es un honor y refleja nuestra profunda gratitud por vuestro apoyo continuado", ha declarado Tenas.
El acto también ha servido para agradecer la dedicación de las voluntarias y colaboradores que, con su esfuerzo durante todo el año, hacen posible el éxito del rastrillo. El vicario general de la Diócesis, Nicolás López Congosto, en representación de la parroquia de Santiago Apóstol, ha cerrado el evento con una oración de Acción de Gracias y ha pedido la bendición para todos los asistentes y visitantes del rastrillo.
"Que este rastrillo solidario, con el esfuerzo de tantos, sea un testimonio de esperanza y amor por quienes más lo necesitan", expresó al declarar oficialmente inaugurado el evento, que permanecerá abierto los próximos días como un espacio de solidaridad y compromiso con un mundo más justo.