El número de mujeres víctimas de violencia de género en Aragón ha aumentado un 14,2% en un año, según el Observatorio de Violencia sobre la Mujer, de Género y familiar. Frente a las 3.561 contabilizadas en 2021, en 2022 la cifra de víctimas se elevó a las 4.068. El mayor porcentaje de estos delitos se ha producido entre las mujeres extranjeras con un incremento del 22,1% en tanto que aumento en el número de víctimas entre las españolas ha sido de un 9%. Los juzgados de violencia de género en Aragón han tutelado a 31 menores frente a los 13 de 2021, lo que se traduce en un incremento del 38.5%.
En estos juzgados se recibieron 4.454 denuncias en 2022, lo que supone un 11,1% más que las registradas en 2021. Aumenta también en un 36,7% el número de renuncias de las víctimas a declarar como testigos, y entre ellas son las mujeres españolas las que más se han acogido a este derecho, un 43,8% frente a las mujeres extranjeras que los han hecho en un 29,5%.
En lo que a medidas cautelares de protección y medidas de seguridad se refiere, los órganos judiciales de la comunidad han incoado 951 órdenes, un 9,7% más que en 2021 y se han adoptado 801 frente a las 749 de 2021, un incremento del 6,9%. Durante el pasado año los juzgados aragoneses de Violencia sobre la Mujer tramitaron 4.495 asuntos penales, de los cuales 1.369 fueron Diligencias Urgentes, 2.124 Diligencias Previas, 806 Procedimientos abreviados y 13 sumarios y 183 juicios por delitos leves.
Los datos de los juzgados de Violencia sobre la Mujer referidos a 2022 señalan que estos órganos enjuiciaron el pasado año a 745 hombres, un 15,3% más que el año anterior. De ellos, un 13,7% fueron hombres de nacionalidad española y un 16,4% extranjeros. Incrementos que se producen también en el número de sentencias condenatorias. Estos órganos dictaron 687 sentencias condenatorias, un 14,1% más que el año anterior.
La presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, Ángela Carmona, afirma que hay que ser muy prudentes a la hora de valorar los principales datos de la violencia machista correspondientes a 2022, pues el importante incremento tanto del número de víctimas (175.858, un 10,35 % más que en 2021) como del número de denuncias (181.465, 11,43 % más) muestran de forma contundente que la violencia machista sigue, desgraciadamente, muy presente en nuestra sociedad.
La media diaria de denuncias presentadas y de mujeres víctimas de violencia machista -499 y 483, respectivamente- alcanza cifras que, en opinión de Carmona, son “absolutamente inasumibles” y deben servir para concienciar a toda la sociedad de la necesidad de seguir avanzando en la lucha contra este tipo de violencia desde todos los ámbitos. Desde luego, desde las instituciones, pero también desde el ámbito privado, pues la colaboración de cada uno de nosotros, de cada ciudadano en particular, así como de empresas, centros educativos, sanitarios o medios de comunicación, por citar sólo algunos ejemplos, es muy importante y puede ayudar a salvar vidas.
Ángeles Carmona considera que, pese a todo, estas cifras también demuestran que las mujeres víctimas de violencia de género acuden cada vez en mayor número a la justicia, cada vez son más las que dan el paso y denuncian a su agresor. Y este hecho debe valorarse positivamente, porque la interposición de la denuncia es la única vía para que estos delitos no queden impunes y, en muchos casos, el único camino que permite a las víctimas salir de la espiral de violencia en la que están sumidas ellas y sus hijos e hijas. “Poner los casos de violencia machista en manos de la Justicia y dejar que ésta actúe de forma implacable, pero siempre desde el absoluto respeto a los derechos de todas las partes del proceso, traslada a todos los ciudadanos el mensaje de que quien cometa este tipo de delitos va a ser condenado”, asegura.
La presidenta del Observatorio destaca el porcentaje de órdenes de protección acordadas, que se mantiene en siete de cada diez que se solicitan (69,46 %), así como el importante aumento, un año más, de la suspensión del régimen de visitas (un 104 %) y de la suspensión de la guarda y custodia (un 58,8 %). Son datos que merecen una valoración muy positiva porque ponen de manifiesto una mayor protección de las mujeres y también de los niños y niñas víctimas de violencia de género.