El Sindicato de Enfermería SATSE exige nuevamente que se cubran todas las plazas de enfermería y fisioterapia asignadas al inicio del curso escolar, tanto en centros de educación ordinaria como especial. “La ausencia de estos profesionales vulnera el derecho de los alumnos con patologías o discapacidades a participar plenamente en la vida escolar,” afirman desde el sindicato.
Educación conoce el número de profesionales necesarios antes de iniciar el curso, basado en el alumnado con necesidades especiales matriculado. Sin embargo, cuatro meses después del comienzo de las clases, faltan al menos cuatro enfermeras y dos fisioterapeutas en colegios de Aragón. Estas previsiones deben transformarse en contratos efectivos. “Reconocer que los alumnos necesitan estos profesionales no sirve de nada si no se contrata al personal necesario,” denuncian.
LAS FAMILIAS ASUMEN EL CUIDADO DE SUS HIJOS
En algunos centros, como los de Monzón, Barbastro y Binéfar, las plazas no se han cubierto en todo el trimestre. Además, hay profesionales que deben atender varios colegios, lo que agrava la situación. “Algunos padres han tenido que acudir personalmente a las aulas para realizar tareas esenciales, como aspiraciones en niños con problemas respiratorios,” explican desde SATSE. De lo contrario, los niños se ven obligados a quedarse en casa, con todas las desventajas que eso implica para su desarrollo.
La falta de personal sanitario obstaculiza directamente los principios de la escuela inclusiva. Sin enfermeras ni fisioterapeutas, los alumnos no pueden participar plenamente en actividades escolares. “Por ejemplo, un niño con problemas respiratorios no puede realizar actividades acuáticas que forman parte del programa escolar si no tiene apoyo profesional,” señalan. Esto supone una exclusión que va en contra de la Orden de 7 de junio de 2018, que promueve la igualdad de oportunidades en el entorno educativo.
EDUCACIÓN ESPECIAL
La problemática afecta también a los centros de educación especial, donde todo el alumnado requiere atención sanitaria. La plantilla es insuficiente, los profesionales deben duplicar turnos y, en algunos casos, se asignan tareas de enfermería a personal no cualificado. “Esto no solo recarga al personal, sino que también compromete la seguridad de los alumnos,” advierte el sindicato.
Además de la carencia de personal, las instrucciones de principios de curso que regulan aspectos fundamentales del trabajo de estos profesionales no se han publicado. Tampoco tienen acceso a plataformas de formación continua del Salud, y los fisioterapeutas deben costear de su bolsillo los desplazamientos entre centros. “Desde principio de curso, no se les ha abonado el kilometraje, a pesar de sentencias que obligan a la Administración a hacerlo,” recuerdan.
URGEN SOLUCIONES
SATSE exige medidas urgentes para resolver esta situación recurrente y garantizar los derechos de los alumnos con necesidades especiales. “El abandono de estos profesionales y alumnos no puede seguir perpetuándose curso tras curso. Es necesario un cambio inmediato,” concluyen desde el sindicato.
La falta de personal y recursos compromete no solo el derecho a una educación inclusiva, sino también el bienestar de los alumnos más vulnerables.