Una treintena de mujeres se encontraron en la casa madre de las Misioneras del Pilar de Huesca el pasado domingo gracias a la iniciativa de la incipiente Revuelta de las Mujeres en la Iglesia de Huesca.
En este encuentro de oración y celebración compartieron sus deseos para una Iglesia en igualdad, en la que su papel se haga visible y sea valorado tanto por la propia institución eclesial como por la sociedad.
En su manifiesto, leído conjuntamente al final de la celebración, ponen de relieve su compromiso en la Iglesia y en sus ambientes, así como denuncian la invisibilidad de las mujeres dentro de la Iglesia, pese a todas las tareas asumidas por ellas en este espacio.
Aprovechan este escrito para animar a la Iglesia a que sea crítica con las realidades que nuestra sociedad vive, de forma que se posicione siempre en favor de la dignidad de las personas. Junto con la red que forma la Revuelta de las Mujeres en la Iglesia de todo el territorio nacional, este grupo de mujeres gritarán, previo a este próximo ocho de marzo, que no pararán "¡hasta que la igualdad se haga costumbre!".
